Es un concepto del teórico marxista Gramsci, que se refiere a las formas de dominación del capitalismo, en dimensiones sociales, culturales, mentales, ideológicas. Las formas de dominación atraviesan las conciencias, muchas veces de modos imperceptibles. El feminismo marxista utilizó esta categoría de análisis para cuestionar las hegemonías del mandato corporal y de belleza dominante. Derribar las hegemonías implica derribar intereses creados por sectores dominantes.